El gremio que lidera Roberto Fernández había avanzado en un acuerdo por una suba para los choferes de 31% para el primer semestre. Pero la firma está demora porque las empresas de colectivos reclaman un incremento de los subsidios al sector.
08/02/2023 21:38
- Clarín.com
- Política
Actualizado al 08/02/2023 21:38
La conducción de la Unión Tranviaria Automotor (UTA), el gremio que agrupa a los choferes de colectivos, expuso este miércoles su malestar por la falta de avances en la definición del aumento salarial de la actividad, y amenazó con paralizar los servicios desde la próxima semana si no se cierra un entendimiento para el primer tramo de las paritarias de 2023.
La advertencia fue lanzada desde la cúpula del gremio que lidera el dirigente Roberto Fernández ante las demoras en las negociaciones por la suba salarial que reclaman los choferes y la falta de pago de un suplemento de $ 20.000 acordado en septiembre pasado y que los trabajadores debían percibir desde enero.
“El Gobierno tiene que intervenir para la solución del acuerdo en paritarias. El aumento es el sostén de los trabajadores y no permitiremos ser juguetes de las partes negociadoras. Por lo tanto, si esta semana no tenemos acuerdo habrá inconvenientes en los servicios”, anticiparon cerca de Fernández.
A mediados de enero el sindicalista había acercado posiciones con el Gobierno y con representantes de las cámaras empresarias del transporte de pasajeros para sellar un acuerdo salarial que implicaba un incremento de 31% en tres tramos acumulativos (10% desde enero, 10% desde marzo y 7% restante en mayo) para el primer semestre del año.
El convenio, a pedido del gremio, incorpora una cláusula de revisión como garantía frente a la suba de precios.
Sin embargo, la firma del entendimiento quedó atada a la negociación paralela entre el Ministerio de Transporte y los empresarios por el aumento de los subsidios del Estado al sector. Allí persisten desacuerdos: los dueños de los colectivos piden un ajuste en los subsidios mensuales que reciben.
Según fuentes del sector, el Gobierno les ofrece un adicional mensual de $ 5.000 millones durante el primer semestre. Pero ellos dicen que necesitan una recomposición de $ 27.000 millones. La diferencia es bastante amplia, $ 22.000 millones. Esas discrepancias demoran la firma de la paritaria sectorial, por la que ahora el gremio amenaza con medidas de fuerza.